Eclesiastés 3:1 (RVR-60)
1 Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Muchas veces quisieramos vivir o adelantar las cosas, pero aprendemos que todo tiene su tiempo. Por más que uno quiera, no podemos acelerar el reloj del tiempo que ya Dios estableció para nuestra vida.

PUNTO 1: JUSTO A TIEMPO
Eclesiastés 3:1 (PDT)
1 Todo tiene su momento; todo lo que sucede bajo el cielo ocurre de acuerdo a un plan.
Debemos aprender que Dios tiene un momento preparado para cada uno de nosotros, aunque muchas veces no estemos muy convencidos pero Dios se encarga de afinarnos.
Todo lo que estamos pasando es porque Dios tiene un plan, recordemos que en todo el Señor sabe llegar justo a tiempo.
PUNTO 2: FRENTE A LOS RETOS
Éxodo 14:21-22 (RVR-60)
21 Y extendió Moisés su mano sobre el mar, e hizo Jehová que el mar se retirase por recio viento oriental toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas.
22 Entonces los hijos de Israel entraron por en medio del mar, en seco, teniendo las aguas como muro a su derecha y a su izquierda.
Moisés tenía 3 opciones: orar, marchar o pelear. Israel no era un pueblo experto en armas y el comenzó a orar pues es lo que sabía hacer pero Dios le dice dile a los hijos de Israel que marchen. Nuestra oración en algún momento va a necesitar que la pongamos en acción.
No es momento para una fe en reposo, es hora de activar y creer para que nuestra fe avance.
PUNTO 3: ORANDO EN SU TIEMPO
Hechos 12:5 (RVR-60)
Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel; pero la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él.
Y cuando Herodes le iba a sacar, aquella misma noche estaba Pedro durmiendo entre dos soldados, sujeto con dos cadenas, y los guardas delante de la puerta custodiaban la cárcel.
Debemos saber que es necesario que busquemos a Dios, y que oremos los unos por los otros. Es hora de que creamos que nuestra oración es escuchada y es alli donde veremos al Señor llegar justo a tiempo para rescatarnos.
Y estas son Palabras de Vida Eterna West, para usted. Pastor Alejandro Aguirre.