2 Reyes 6:17 (RVR-60)
17 Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de Eliseo.
Con el tiempo se nos va haciendo difícil orar, pero todos debemos tener el valor por la oración.
La oración es una de las armas que debemos de tener bien clara, para todos los que hemos sido llamados a la conquista.
PUNTO 1: CONQUISTANDO EN ORACIÓN
2 Reyes 6:17 (RVR-60)
17 Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de Eliseo.
La oración abre nuestros ojos, para ver lo que no se ve sin oración.
Muchos no vemos la salida a nuestros problemas, solo porque no oramos. En este año de conquista debemos orar en todo momento y podremos ver las bendiciones que Dios nos quiere dar.
PUNTO 2: TRES RAZONES PORQUE NO ORAMOS
Mateo 26:40-41 (RVR-60)
40 Vino luego a sus discípulos, y los halló durmiendo, y dijo a Pedro: ¿Así que no habéis podido velar conmigo una hora?
41 Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil.
Hay algunas razones, porque se nos hace un poco difícil orar:
2.1 Porque la carne es débil: el evangelio no es para reprimidos. Debemos enseñarle a nuestra carne, que ella no manda, sino que hay que disciplinarla para orar.
2.2 Hay batallas espirituales en contra de la oración: el diablo sabe el poder que tiene la oración, y se opone.
2.3 No tienes una claridad de lo que es hablar con tu Padre, es a tu Padre al que oras: debemos orar porque lo que Dios nos entrega en oración, será para engrandecernos y nadie nunca no los puede quitar.
PUNTO 3: VUELVE A ORAR
Santiago 5:13-18 (RVR-60)
13 ¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas.
14 ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor.
15 Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados.
16 Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.
17 Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses.
18 Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto.
Nos conviene la oración, como nos conviene el agua para nuestro cuerpo.
Nunca veremos a Dios negarse a contestar una oración, aunque muchas veces su respuesta no sea la que queremos.
¡Lo lindo es saber que el Padre Responde!
Y estas son Palabras de Vida Eterna West, para usted. Pastor Alejandro Aguirre